Bajas en tarifas de Fletes Internacionales

Tras el fuerte incremento producido por la pandemia, los valores retroceden hacia un escenario más razonable. Preocupación en las navieras, que mueven sus fichas.

Haciendo “uso” del modelo económico popularizado por Adam Smith en el Siglo XVIII, sobre cómo se relacionan los Precios de los productos y servicios, con la Oferta y Demanda de estos (Ley de Oferta y Demanda), es podemos explicar brevemente qué está sucediendo hoy con el mercado de Fletes Internacionales y de allí que:

A nivel internacional, debemos tener en cuenta que venimos de picos de precios como nunca vimos antes, por efecto de la pandemia y la posterior congestión global que esto generó.

No obstante, hoy hay diversos factores que hacen tender a la baja los precios de los fletes marítimos, a saber:

Disminución de la demanda de fletes, analizando esto nos encontramos que:

Los niveles de stock de mercancías se han ido ordenando, luego de haber quebrado en muchas empresas debido a la falta de abastecimiento durante la pandemia.

La inflación global, ha generado medidas de enfriamiento económico en muchos países (incremento de tasas de interés), sumado con cierto proteccionismo de moneda de diversos Bancos Centrales, lo que provoca menor comercio internacional.

Los colapsos y congestiones de las terminales portuarias han ido disminuyendo, por un lado, debido a los puntos precedentes que generan disminución de los movimientos físicos de mercadería y por otro lado, debido a la puesta en marcha de fuertes inversiones realizadas sobre la infraestructura de las mismas, lo que provoca un incremento en la capacidad operativa efectiva.

Estas inversiones, se han dado en muchos casos como consecuencia de la colocación de los exorbitantes (y extraordinarios) resultados de las mismas empresas navieras.

Incremento de la oferta.

Desde este lado de la balanza, podemos observar un Incremento de las eficiencias operativas del transporte en su conjunto, debido a la posibilidad de las Compañías Marítimas de realizar fuertes inversiones sobre CAPEX, que estuvieron relegadas durante años. Visto en: Nuevos servicios portuarios, adquisición de compañías e incremento de flota de buques

Lo que provoca, un menor lead time y liberación de los buques en forma anticipada, y por otro lado un incremento directo de capacidad instalada, incrementando la oferta.

Esta situación de disminución de la demanda con un incremento de la oferta, hace en forma directa y acelerada un reordenamiento de los precios, entendiendo que los mismos podrían llegar en el futuro a niveles prepandémicos. Al menos desde el punto de vista del mercado en donde ya ha castigado la cotización de las acciones de las principales compañías navieras.

No obstante esto, la economía tiene sus jugadores, y en este caso las compañías navieras han comenzado a operar para que la caída de los precios no sea tan abrupta y poder “manejar ciertas palancas del mercado”. De ahí que ya se percibe una disminución de la oferta mediante:

–          La ralentización de la velocidad de los buques, respaldados en una “visión verde” con el fin reducir el impacto ambiental,

–          La cancelación de partidas, para evitar movimientos con espacio ocioso, provocando en parte una nueva congestión de los puertos y por otro lado, una incertidumbre sobre la cadena de suministros de mercadería, lo que podría provocar nuevamente un incremento de los stocks de la compañías importadoras.

Argentina, una pluma.

A nivel nacional, debemos tener presente que el impacto del mercado argentino en el tráfico marítimo internacional es mínimo, pero por otro lado contamos con al menos dos factores determinantes que apuntan a la disminución de demanda:

Por el lado de las importaciones, las mismas se encuentran extremadamente restringidas con el fin de proteger las reservas del BCRA.

Y con respecto a las exportaciones, nos encontramos que la cotización del dólar de exportación (con su correlación en los costos inflacionados locales), hace que no sea tan interesante para muchas empresas el desarrollo de los mercados externos. Provocando esto que en general las compañías sólo estén enfocados en la “mantención” de los mercados ya generados, ya que evalúan la inversión (monetaria y temporal) que debieron realizar para su generación, y no se encuentre un desarrollo de nuevas unidades de negocio de exportación.

Autor: Revista Container